miércoles, 18 de julio de 2012

Quiero ser Amaryi!!!


Dando vuletas al significado que encontramos en su día de la plabra AMARYI: En sumerio literalmente ‘retorno a la madre’; señala Murray Bookchin que curiosamente ‘amaryi’ es la primera palabra en la historia, que designa la ‘libertad’, concepto inexistente en un mundo donde no había represión y que –lógicamente surge cuando la libertad desaparece, con el advenimiento del patriarcado; por eso la identificación de ‘libertad’ con "retorno a la madre".

Pienso muy a menudo en ello y la equivalencia que tiene con la palabra libertad, me pregunto por ello muchas veces: como ser el emblema de la libertad para una hijo o hija? Siempre llego a la misma conclusión, dejando que esa personita pueda ser ella misma, procurando que nada, ni siquiera yo misma pueda frenarla en el hacerse y encontrarse. Sin embargo muchas veces me encuentro a mi misma intentando “corregir” un rasgo de la personalidad de mi hija. Corregir significa enmendar lo errado, pero, ¿quien me dio derecho a mi para calificar un rasgo de la personalidad de mi hija como errado? Quien soy yo para decir que ser asi o asá es mejor que ser una misma?
Llegados a este punto muchas personas podrían pensar, las madres y los padres deben guiar, deben enseñar a sus hijos e hijas la manera de vivir en sociedad. Y no les quito razón pero a que sociedad debo enseñar a vivir a mi hija a esta en la que vivo? O en la que me gustaría queviviese?
Si es en la que vivo, quizás tenga entonces que guiarla por las normas de la diplomacia, del saber estar, de la apariencia y el engaño, de los modelos de belleza que dicta esta sociedad, de la prioridad de encontrar un buen empleo para no ser un marginado social, tendría que enseñarle que el que no se revela se adapta mejor, que el que sigue las normas marcadas es premiado y el que no es perseguido, despreciado, tachado de raro, adiestrado…Debería enseñarle que con el dinero se puede comprar casi todo, que la gente juzga por las apariencias, que la mayoría de la gente no dará ni hará nada por nada, que desafortunadamente en esta sociedad que ha creado la humanidad, occidental al menos y hasta ahora, casi siempre hay un interés particular en cada acto que se hace por el otro. Debería advertirle que alguna gente procurará engañarla para manipularla…y así, prepararla para las maldades de este mundo.
Pero si la guío por la sociedad que a mi me gustaría que fuera…acaso no estaría siendo yo la manipuladora? Acaso no sería yo la que no permitiría que soñara ella su propio mundo?
“Retornar a la madre…”era mas sencillo cuando estaba dentro de mi, o incluso cuando ella simplemente observaba y descubría el mundo físico, ahí solo tenía que observar en la distancia, disfrutar de sus invitaciones al juego, aprovisionarla de un espacio seguro, de amor, de respeto a sus necesidades. Cuando todo eran sensaciones agradables o desagradables, cuando mis besos, mis caricias y la teta lo podían curar todo. Ahora que empieza a crecer, que tengo que luchar contra barbies y príncipes azules, me siento perdida no se como no ser para que ella SEA.
Quiero ser amaryi!! Quiero ser libertad! Pero quizás antes tenga que descubrir que significa esta gran palabra. El diccionario de la Real Academia dice en su primera acepción:” Facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos.”
Es decir que la libertad va ligada a la responsabilidad de los propios actos. Quizás esta entonces podría ser mi guía, quizás no habrá que valorar, ni enmendar, ni corregir, ni censurar, tendría que bastar con advertir de las consecuencias, claro esta, sin imponer ni hacer un númerus clausus de esas consecuencias.
Pues al fin y al cabo como dice ese proverbio chino: En la naturaleza no hay castigos ni premios, solo consecuencias.

Yarim`12